Investigaciones en curso

Os mostramos las investigaciones que estamos desarrollando en este momento

CAMBIOS TERMOGRÁFICOS EN LA PARTE DISTAL DE LOS MIEMBROS DEL CABALLO DURANTE EJERCICIOS EN TREADMILL CON DIFERENTE INCLINACIÓN.

¿POR QUÉ HACER ESTA INVESTIGACIÓN?

El ejercicio controlado, primero en treadmill acuático (‘water-treadmill) y luego en treadmill terrestre, es esencial en la rehabilitación tras una lesión músculo-esquelética. El objetivo de este ejercicio controlado es mejorar el rango de movimiento de las articulaciones, para evitar la contractura articular y el acortamiento adaptativo de los tejidos blandos. Además, el ejercicio reduce el dolor, incrementa el flujo sanguíneo y linfático y mejora la producción y difusión de líquido sinovial.

Tradicionalmente, se ha recomendado ejercicio sobre superficie blanda o dura, a la cuerda, de duración progresiva, en los periodos iniciales de rehabilitación. EL EJERCICIO CONTROLADO ES MÁS SEGURO EN UN TREADMILL QUE EN UNA PISTA. Es una superficie no resbaladiza, con una concusión mínima y un control exacto de la velocidad, que se puede variar según el nivel de rehabilitación del caballo. Otra ventaja del treadmill es la MODIFICACIÓN DE LA PENDIENTE. Los ejercicios cuesta arriba fortalecen los miembros pelvianos, al requerir un trabajo sinérgico y concéntrico de extensores de dorso y de la pelvis, musculatura con una función importante durante la propulsión. Además, cuando un miembro se lesiona, y aparece una cojera, el sistema nervioso acepta como ‘normal’ el patrón de movimiento irregular que el animal adapta por el dolor. Tras la resolución de la lesión, se complica la vuelta al movimiento normal y fluido. El treadmill es importante para la re-educación del movimiento, haciendo que el caballo trabaje de forma acompasada, ya que la cinta exige que cada tranco cubra la misma distancia que el anterior y el animal se ve forzado a equilibrar los músculos responsables de su movimiento. La pendiente es también muy útil para rehabilitar pacientes con tendinitis y desmitis.

También se ha demostrado que el entrenamiento en pendiente es útil para todo tipo de caballos (velocidad, concurso completo, doma, resistencia, salto…), ya que la fase de apoyo y la duración de la actividad muscular se mantienen más correctamente con una mayor actividad electromiográfica muscular. Los caballos con problemas de dorso también se benefician del ejercicio en cinta con inclinación. Se ha visto que tres músculos de dorso (esplenio, longísimo y recto del abdomen) incrementan su actividad con la pendiente de la cinta, para incrementar la estabilidad para elevar el centro de gravedad del caballo hacia delante y hacia arriba. Finalmente, el trabajo en treadmill con pendiente requiere una mayor tensión de la musculatura del dorso y del cuello, sobre todo durante la propulsión, cuando los músculos paravertebrales trabajan concéntricamente y favorece los movimientos de la pared abdominal, dando estabilidad a la columna vertebral.

¿QUÉ ESTAMOS HACIENDO?

Estamos evaluando la influencia de la pendiente de la cinta rodante terrestre (3 y 6% de pendiente) en la distribución de flujo sanguíneo en los miembros torácicos y pelvianos, evaluada mediante termografía. La termografía es una técnica no invasiva que mide las emisiones infrarrojas (de temperatura) de la superficie corporal, dando una representación gráfica de la temperatura superficial.

HIPÓTESIS QUE ESTAMOS ESTUDIANDO

Queremos demostrar que, la mayor pendiente de la cinta rodante (6%) incrementa el patrón circulatorio y el flujo sanguíneo local en los miembros pelvianos más que una pendiente inferior (3%) o trabajo en plano.