Si mal no recuerdo hubo un tiempo en el que la doctrina marxista
(la del socialismo quiero decir) tenía como fundamento, en lo que se
refiere al enfoque social, la convicción de que la única variable
independiente y determinante de los procesos sociales era la
economía.
Por eso, su materialismo filosófico se forja a partir del
convencimiento de que la realidad última y determinante de la vida
social es la "estructura económica", conformada por los "medios de
producción" y las "relaciones de producción" (relaciones sociales
establecidas entre los propietarios de los medios y los
trabajadores).
El derecho, la filosofía, la religión, la moral, la educación,
sostiene el marxismo, son "súper-estructuras", son reflejos de la
estructura y se adaptan para favorecer su funcionamiento y encubrir
asi sus injusticias.
Marx sustentaba que la historia, impulsada por la lucha de
clases, tiende a transformarse hacia un nuevo y definitivo tipo de
sociedad, la "sociedad comunista", en la que ya no habrá división de
clases sociales, porque no habrá propiedad privada de los medios de
producción (y en consecuencia, nadie trabajará para un "tercero" y
ningún "tercero" se apropiará de "plusvalía" alguna).
Me pregunto, ante la deslumbradora luz de tales aseveraciones,
¿si es posible que quede hoy algún marxista?, o es que como se ha
perdido el referente económico de la "estructura" en su política
social (convirtiéndose en los llamados "nuevos burgueses") sólo les
queda, consecuentemente, la posibilidad de contribuir al fundamento
y a la cimentación de nuevos nacionalismos, religiones, morales y
educaciones, entre otras "súper-estructuras".
Y si es así, ¿quién será el "tercero" que se esté llevando la
"plusvalía"?
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