PARTICIPACIÓN DE LOS ORIENTADORES EN LOS MODELOS DE LIDERAZGO: UN MODELO COLABORATIVO

 

Ares Ruiz, Susana

Universidad de Córdoba

 

 


 

Los orientadores/as: nuevos líderes en el centro educativo

 

 

“La pregunta ¿quiénes son los líderes? Adquiere en estos momentos toda su significación. De la respuesta ofrecida vendrán claves para conceptualizar el liderazgo.¿Son los hombres, las mujeres?¿son los jefes, es el director/a?¿son los profesores, somos todos?¿es el grupo?...Quizás la propia pregunta carezca de sentido. Lo que si parece claro es la imposibilidad de comprender el desarrollo del liderazgo sin el componente de colectividad que inunda cada parte constitutiva de este fenómeno organizativo. Con frecuencia tendremos que mirar donde menos lo esperábamos, justo al lado contrario, cuando pretendamos encontrar “indicios evidentes” de su  presencia” (Coronel,1996, p.138)

 

Cualquier persona, incluso ajena al mundo educativo, que escuche o lea la frase “ liderazgo en  los centros escolares”  , seguramente la asociará inmediatamente a la función directiva .

Si nos centramos en el entorno educativo, descubrimos que la mayor parte de los estudios sobre el tema toman casi en exclusiva la figura del director/a del centro. Y viceversa, los estudios sobre la dirección escolar se encuentran generalmente asociados a los del liderazgo educativo (Gimeno Sacristán,1995).Sin embargo, sin dejar de lado el importante papel del director/a, es necesario, como afirma Coronel Llamas (1996), recuperar el papel vital de  los otros, lo que nos conduce directamente al concepto de comunidad democrática. Es entonces cuando podemos empezar a hablar del profesor/a como líder, de las funciones de liderazgo de las asociaciones de padres y madres, del liderazgo del alumnado y del tema que ocupa a esta comunicación: el papel del orientador/a  como líder en los centros educativos.

 

Quizás por tratarse de una figura relativamente reciente, al lado del orientador/a es a donde menos esperamos tener que mirar para encontrar indicios   de la presencia del liderazgo educativo. Sin embargo, en nuestra opinión, el papel a desempeñar por el mismo puede ser crucial para el desarrollo del liderazgo educativo, sobre todo para incorporar en esta tarea a otros miembros de la comunidad educativa, muy especialmente al profesorado. La posición del orientador/a en el centro es privilegiada como pocas, en el sentido de que mantiene relaciones continuadas con los diversos sectores de la comunidad educativa: profesorado, familias, alumnado y equipo directivo .Además su figura no está  tan revestida de autoridad, como lo ha estado tradicionalmente la del director/a, lo que en ocasiones le facilita el acceso a determinada  información, que es necesaria para contribuir al buen funcionamiento del centro en todos los sentidos.

 

El objetivo de este trabajo es analizar las funciones del orientador/a relacionándolas con el liderazgo educativo, y estableciendo a su vez un paralelismo entre estas funciones y las funciones del director/a considerado el líder formal del centro educativo. Todo ello partiendo de un estilo concreto de liderazgo, así  como de  un determinado modelo de orientación.

 

 

Enfoques sobre el liderazgo

 

Abordar el papel del orientador  como líder y caracterizar su perfil  como tal, nos lleva a reparar previamente en la cuestión de los estilos de liderazgo. Esta tarea no es fácil,ya que existen diversos enfoques acerca del liderazgo, que dan lugar , a su vez, a diferentes estilos de liderazgo.

 

Siguiendo a Johns y Moser (1990) , podemos decir que son tres básicamente los enfoques sobre el liderazgo.

 

Cronológicamente, en primer lugar situaríamos el enfoque de rasgos que se caracteriza por tratar de descubrir los rasgos comunes de los líderes. Se basa pues en la idea de que el líder no se hace,sino que nace.Sin embargo, no existen pruebas científicas que avalen esta teoría .Además, como argumenta Pascual (1987), no existe el perfil de personalidad ideal, ni existen rasgos universalmente válidos para todas las situaciones.

 

Por el contrario, el siguiente enfoque, el conductual, se centra más en el estudio de lo que los líderes hacen en distintas situaciones. Es importante mencionar, las tipologías a las que las asunciones de este enfoque han dado lugar, entre las que cabe destacar la de Lippit y White(1943):autoritario, democrático y “laissez-faire”, y la de Blake y  Mouton (1978): liderazgo orientado a las personas y liderazgo orientado hacia la tarea. Este modelo tampoco permite definir el estilo de liderazgo más óptimo, puesto que determinados estilos aparecen como superiores en determinadas circunstancias pero no en todas.

 

La conclusión anterior pone en evidencia que los estilos no son excluyentes entre sí ,sino que un estilo es adecuado o no en función de la situación. Se trata de lo que denominamos enfoque situacional Desde este enfoque, del que queremos partir en nuestro trabajo, se considera que el liderazgo está estrechamente relacionado con factores como las relaciones entre los distintos sectores, el clima organizativo  y otros factores contextuales.

 

 Como afirman Chemers y Ayman (1993) la realización de un liderazgo efectivo depende  de la interacción de cualidades del líder  con las demandas de la situación.

 

 

Estilos de liderazgo educativo

 

Una vez vistos a grandes rasgos los diferentes enfoques sobre el liderazgo, es necesario considerar al menos algunos estilos de liderazgo distintos.

La tipología que a nuestro juicio merece más interés es la  referida al liderazgo transaccional y al  liderazgo transformacional

 

El líder transaccional viene a considerarse un intermediario que actúa burocráticamente. Necesita conocer lo que los subordinados necesitan y desean , dando confianza para que estos presten el esfuerzo necesario para alcanzar los niveles de rendimiento esperados (Bass,1985).

 

Sin embargo, el liderazgo transformacional , por el que nosotros optamos, conlleva todo un proceso a través del cual  se intenta desarrollar la capacidad de los “seguidores” de determinar su propia actuación, llegando a convertirse ellos mismos en líderes (Bass y Avolio,1994).Este líder es por tanto más activo que reactivo, capaz de establecer metas y objetivos claros, capaz de conseguir y usar recursos y dar un margen de autonomía a sus colaboradores.

 

 

De esta manera optamos por un estilo de liderazgo que se adapte a las circunstancias del momento y del entorno, así como a la situación del grupo a partir de su grado de competencia y motivación. Asimismo  queremos partir de un estilo de líder que estimula a los otros en sus esfuerzos para innovar y ser creativos, incluyéndolos en el proceso de analizar y encontrar soluciones. que cree profundamente en el trabajo de equipo y que tiene una visión de la organización pero no la impone.

 

 

Modelos de orientación psicopedagógica

 

Llegados a este punto consideramos necesario distinguir entre diversas categorías de modelos de orientación, y aclarar cuál es nuestra posición al respecto, puesto que del modelo de orientación  adoptado dependerá en parte el estilo de liderazgo que es posible desarrollar, como veremos a continuación.

 

Siguiendo a Bisquerra y González (1998),podemos decir que los modelos de orientación son “modelos para”, que sirven de guía para la  acción: su función consiste en proponer líneas de actuación práctica.

 

 

 

Los mismos autores distinguen entre  tres modelos básicos de orientación psicopedagógica:

 

o              Modelo clínico de atención individualizada.

o              Modelo de programas.

o              Modelo de consulta.

 

 El  modelo clínico de atención individualizada  se centra en la relación personal orientador-orientado, con el objetivo de satisfacer las necesidades de carácter personal, educativo  y socio-profesional del individuo. En este modelo la iniciativa de solicitar ayuda es del “cliente”.

 

Se trata de un modelo en el que el orientador/a no está integrado en la dinámica del centro, sino que se comporta como un técnico. Es por ello que difícilmente se corresponde con  el estilo de liderazgo por el que se opta, puesto que no considera las variables situacionales ni grupales sino sólo a la persona individual en el contexto de la intervención especializada actuando además con carácter reactivo.

 

El modelo de consulta  entendiendo la consulta como una relación entre dos profesionales generalmente de diferentes campos, se basa en una intervención indirecta, es decir, se trata de  aumentar la competencia del consultante (profesor/a)  en sus relaciones con una persona, grupo o una organización (todo un centro educativo).No nos detendremos más en este modelo, ya que la intervención varía mucho en función del modelo de consulta de que se trate: colaborativa, centrada en el consultante, centrada en el programa,...

 

De acuerdo con el  modelo de programas  antes de iniciar la acción orientadora hay que realizar un análisis del contexto.   De este se pueden extraer las necesidades, competencias y potencialidades    de los sujetos. Como apuntan Montané y Martínez (1994), en cuanto al rol del orientador , la intervención por programas surge de su total integración y colaboración con la institución educativa. Siguiendo a estos mismos autores podemos decir que los programas persiguen la consecución de los objetivos educativos del centro y del aula  y para ello utilizan todos los recursos del centro educativo y su entorno inmediato. A través del trabajo en equipo la intervención por programas genera procesos de innovación de la propia institución educativa. Nosotros vamos a tomar este modelo como marco de referencia para analizar el papel del orientador/a en los procesos de liderazgo, ya que además de tratarse del más actual y vigente es el que mejor entronca con el estilo de liderazgo transformacional.

 

 

 

 

Funciones del líder y funciones del orientador

 

Leithwood  y Montgomery (1986) intentan precisar el papel de los directores en los centros educativos. Podemos sintetizar sus aportaciones de la siguiente manera:

 

ü         Construcción y mantenimiento de relaciones interpersonales entre los                       ................p  profesores

ü         Proporcionar al profesorado conocimientos y destrezas.

ü         Recoger información.

ü         Utilizar la autoridad formal

ü         Tener trato directo con los alumnos/as.

ü         Asistir y ayudar al profesorado en sus tareas cotidianas.

ü         Facilitar las comunicaciones dentro de la escuela.

ü         Proporcionar información al profesorado.

ü         Prestar atención a las necesidades especiales del alumnado.

ü         Facilitar la comunicación entre escuela y comunidad.

ü         Establecer objetivos y prioridades en la planificación.

ü         Establecer procedimientos para manejar temas rutinarios.

 

Dado que como decíamos al principio, la mayoría de los estudios sobre la dirección se encuentran asociados a los estudios sobre el liderazgo, estas concreciones del papel del director pueden ser bastante ilustrativas en relación con las que deben ser las funciones del líder en el centro educativo.

 

En cuanto a las funciones del orientador/a , recogemos la clasificación de Riart Vendrell (1996)  acerca de las funciones de la orientación, aunque debe quedar claro que éstas no las lleva a cabo el orientador exclusivamente. A  continuación hacemos un breve recorrido por ellas:

 

1.      Función de asesoramiento: informar del estado y situación de los diversos agentes educativos, facilitarles elementos y datos de reflexión y darles consejo y opinión.

2.      Función de consulta.

3.      Función de coordinación: colaboración, participación y  trabajo en equipo, coordinación del centro con el entorno social e institucional, coordinación entre escuela , casa y comunidad,...

4.      Función de evaluación.

5.      Función de formación: desarrollar habilidades, aptitudes y actitudes, potenciar el crecimiento de las personas,...

6.      Función de información.

7.      Función de investigación.

8.      Función de mediación

9.      Función de necesidades: detectar y analizar.

10.  Función de organización

11.  Función de programación: enunciación y definición de objetivos, provisión de instrumentos o recursos,...

 

A continuación se muestra un cuadro comparativo ,que pretende poner en evidencia como las funciones del orientador/a en el centro educativo son, al igual que las del  director/a, funciones relacionadas con los procesos de liderazgo:

 

Director/a
Orientador/a

Construcción y mantenimiento de relaciones entre el profesorado

Función de coordinación

Proporcionar al profesorado conocimientos y destrezas

Función de formación

Recoger información

Función de evaluación

Función de investigación

Función de necesidades

Utilizar la autoridad formal

Función de asesoramiento

Tener trato directo con los alumnos/as

Función de asesoramiento

Función de formación- información

 

Asistir y ayudar al profesorado en sus tareas cotidianas

Función de asesoramiento

Función de consulta

Función de formación-información

Facilitar las comunicaciones dentro de la escuela

Función de consulta

Función de coordinación

Proporcionar información al profesorado

Función de información

Función de asesoramiento

Función de consulta

Prestar atención a las necesidades especiales del alumnado

Función de evaluación

Función de programación

Función de asesoramiento

Función de necesidades

Facilitar la comunicación entre escuela y comunidad

Función de coordinación

 

Establecer objetivos y prioridades en la planificación

Función de programación

Función de necesidades

Establecer procedimientos para manejar temas rutinarios

Función de asesoramiento

Función de consulta

Función  de programación

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

        

Tabla 1 : Paralelismos entre las funciones del director/a y las del orientador/a

Como hemos podido comprobar las funciones del orientador /a están bastante relacionadas con lo que podrían ser algunas de las funciones del director/a, considerado durante mucho tiempo el líder del centro educativo por excelencia. Sin embargo cada vez son más numerosos los trabajos que se plantean el tema del liderazgo del profesorado, otorgándoles a éstos un papel muy especial en los procesos de liderazgo. En cuanto al papel del orientador/a  no es el objeto de esta comunicación demostrar científicamente este papel sino empezar a  vislumbrar las posibilidades que desde su posición en el Departamento de Orientación, en el centro escolar y en la comunidad educativa tiene el orientador /a  de participar en los procesos de liderazgo educativo.

 

Modelo colaborativo de liderazgo en los centros escolares

 

Tradicionalmente, los procesos de liderazgo en los centros escolares se han venido desarrollando de arriba a abajo(Figura  1). Es decir, ignorando el contexto cultural y el papel de los otros  en la configuración del liderazgo .El director se consideraba fundamentalmente un gestor al servicio de la administración.

 

 

Figura 1 : Modelo tradicional de liderazgo

 

Administración

 

Líderes

 

Director

 
 

 

 

 

 

 

 

 

 

Seguidores

 
 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


El modelo que nosotros proponemos es un modelo más sistémico,en el que todos los sectores de la comunidad educativa se influyen mutuamente y participan  de acuerdo con su posición particular dentro del centro educativo en los procesos de liderazgo.

 

 

 

 Figura 2 :Modelo colaborativo de liderazgo

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Como podemos comprobar en la figura 2 ,en este modelo los procesos de liderazgo ya no se dan de arriba abajo, sino de manera circular. El centro educativo está inserto en la comunidad educativa, a la que además del profesorado en general, el director/a y el orientador/a, también pertenece el alumnado y las familias. A su vez esta comunidad educativa se desenvuelve en un entorno concreto, con el que mantiene relaciones y del que forman parte importantes agentes de socialización que influyen en los procesos de liderazgo como los sindicatos , asociaciones, medios de  comunicación,...

 

Por otro lado, en lo que a los profesionales del centro educativo como líderes respecta , proponemos un modelo en el que director/a, orientador/a  y profesorado mantienen relaciones continuadas  que van en todas las direcciones. De  esta manera dinamizan entre todos los procesos de liderazgo del centro, sin solaparse y sin perder ninguno su propia identidad. Es decir, no se trata de un modelo en el que la responsabilidad del buen funcionamiento del centro queda diluida en el colectivo, sino que a través de la colaboración con los otros cada uno es más capaz de asumir su labor en este sentido y se lleva a cabo una coordinación y retroalimentación constante.

 

 

Conclusiones  

 

1.      La figura relativamente reciente del orientador ha entrado en el panorama educativo ,y como consecuencia en el del liderazgo educativo, lo que nos obliga a mirar en una nueva dirección.

2.      Podemos encontrar similitudes entre las funciones del director/a, líder formal  de los centros educativos, y las del orientador/a , de lo cual se deduce que tiene mucho que aportar en lo que a los procesos de liderazgo se refiere.

3.      Las tendencias actuales no van tanto por la adopción de  modelos de liderazgo que funcionan “de arriba abajo” , como por la de modelos más colaborativos, como el que nosotros proponemos.

4.      En adelante,  será necesario profundizar en las investigaciones acerca del papel del orientador/a en los procesos de liderazgo, la especificidad del mismo, así como su participación en procesos de colaboración con el equipo directivo y con el profesorado.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

                   

 

Referencias Bibliográficas  

 

Álvarez, M.  y Bisquerra, R. (1996).Manual de orientación y tutoría. Barcelona: Praxis.

Bass, B. M. (1985): Leadership and performance beyond expectations. New York: Free Press.

Bass, B. M. y Avolio, B. J. (1994): Improving organizational effectiveness through transformational leadership. Thousand Oaks: Sage.

Bisquerra, R. (Coord.) (1998): Modelos de orientación e intervención psicopedagógica. Barcelona : Praxis.

Blake, R. R.  y  Mouton, J. S. (1978): The new managerial grid. Houston: Gulf Publishing.

Chemers, M. y Ayman, R. (Comps.) (1993). Leadership theory and research. San Diego: Academy Press.

Coronel, J. M. (1996).La investigación sobre el liderazgo y procesos de cambio en centro educativos. Huelva: Universidad.

Gimeno Sacristán, J. (Coord.) (1995):La dirección de centros: análisis de tareas. Madrid: Ministerio de Educación y Ciencias.

Gorrochotegui, A. A. (1997).Manual de liderazgo para directivos escolares.Madrid: La Muralla.

Johns, B.  y Moser ,H. R. (1990): From to trait to tranformation  : the evolution of leader ship theories. Education, 110, 1, 115-122.

Leithwood, K. y Montgomery, D. (1986): Improving the principal effectiveness: The principal profile. Toronto: OISE Press.

Pascual, R. (1987). Liderazgo y participación: Mitos y realidades. Bilbao: Universidad de Deusto.

Tejada, J. (1998).Los agentes de la innovación en los centros escolares .Profesores, directivos y asesores. Málaga: Aljibe.

 

 

 

 

 

 

 

                         


Resumen

 

Como afirma Coronel Llamas(1996), es posible que para encontrar “ indicios evidentes” de la presencia del liderazgo educativo tengamos que mirar donde menos esperábamos, justo al lado contrario. Quizás por tratarse de una  figura  relativamente reciente al lado del orientador/a es  probablemente a donde menos esperamos tener que mirar para encontrar estos indicios. Sin embargo, lo que intentamos vislumbrar precisamente en este trabajo, es las posibilidades que desde su posición particular  en el Departamento de Orientación, en el centro y en la comunidad educativa ,tiene el orientador/a de participar en los procesos de liderazgo.

 

Para ello partiendo de un determinado posicionamiento teórico, es decir de un estilo concreto de liderazgo y de un determinado modelo de orientación, hacemos una análisis de las funciones del director/a, como líder formal del  centro educativo, comparándolas con las funciones del orientador/a en el centro. Las similitudes encontradas entre las funciones de ambos  nos llevan a pensar que el papel del orientador/a en los procesos de liderazgo es bastante más determinante de lo que podemos llegar a pensar.

 

Por otro lado, tradicionalmente los procesos de liderazgo en la escuela se han venido desarrollando “de arriba a  abajo”, es decir el director/a, que estaba al servicio de la Administración, se consideraba el líder exclusivo e indiscutible del centro educativo. Por  el contrario nosotros proponemos un modelo colaborativo, basado en un enfoque sistémico, en el que los profesionales de la educación están inmersos en la comunidad educativa, que a su vez esta inserta en un entorno determinado, y estos profesionales (director/a, orientador/a y profesorado)  desarrollan los procesos de liderazgo a través de relaciones continuas y bidireccionales.