El Laboratorio Jurídico sobre Desahucios, en el que han participado hasta 90 estudiantes, surgió tras el suicidio de un ciudadano desahuciado en Málaga. Se trata de un espacio de investigación para buscar armas jurídicas que ayuden a los afectados y plataformas ciudadanas en su lucha contra las ejecuciones hipotecarias. Uno de sus grandes logros ha sido la presentación el pasado mes de mayo en el Congreso de los Diputados de once medidas contra los desahucios tituladas Derecho a la vivienda y a la esperanza, para demostrar que las soluciones también están en la calle.
