El Máster Universitario en Agroalimentación mantiene, desde su creación, una matriculación regular entre 25 y 30 personas. Es mayoritariamente femenino, ya que la relación de mujeres respecto a hombres es aproximadamente de 2 a 1. Cada año, entre 10 y 15 estudiantes están orientados a la investigación, y el resto a la actividad profesional. Esta situación es también estable, excepto en el curso 12-13, en el que finalmente todos los alumnos prosiguieron su carrera profesional en el ámbito investigador. La profesión de origen es muy variada, el 25% procede de Veterinaria; el 18%, de Biología y el 10% de Química. “Esto es un reto para el profesorado y para el alumnado, ya que unos y otros deben comprender los diferentes niveles de conocimiento que coexisten en las aulas”, explica Rafael Moreno.
Para la próxima edición, el Máster Universitario en Agroalimentación ha organizado su plan de estudios en cinco módulos: producción y tecnología agroalimentaria, gestión de la empresa agroalimentaria, viticultura en climas cálidos, gestión de la calidad y la seguridad agroalimentaria y gestión nutricional y gastronomía.
El postgrado se desarrolla entre enero y mayo en su fase académica y entre mayo y julio o diciembre en su fase de prácticas en empresas y trabajo de fin de máster.