“Todavía se mantienen estructuras de poder masculino en las familias periodísticas”, sostuvo Domínguez, cuyo caso personal compartió con un salón de actos del Rectorado muy animado de público. “Yo soy una mujer cuota”, dijo con un punto de sarcasmo, al recordar que la propietaria de la cabecera estadounidense pidió que la directora del medio homónimo en España fuera obligatoriamente una mujer.
El ascenso de Arianna Huffington a la jefatura del diario digital americano fue posible, explicó Domínguez, por el nuevo escenario abierto por internet, que permite abaratar radicalmente los costes y romper el antiguo monopolio de los grupos empresariales dominados tradicionalmente por los varones. “Las estructuras empresariales de los medios son brutales. ¿Qué ocurre con internet?”, se preguntó Domínguez. “Que es una práctica disruptiva y con pocas personas y recursos puedes sacar a la calle un medio digital”.
Ana Pardo de Vera se mostró, en este sentido, partidaria de la política de cuotas como única herramienta para facilitar la incorporación de mujeres en puestos de decisión. “Los hombres se tienen que implicar para cambiar las estructuras empresariales. Si no, hay que acudir a las cuotas. En un mundo ideal, no harían falta”, argumentó. La directora de Público lamentó que el Grupo Prisa hubiera renovado recientemente su Consejo de Administración sin ninguna mujer entre sus asientos. “¿Cómo no está Angels Barceló?”, lamentó.
Amina Lemrini, presidenta de la Alta Autoridad de la Comunicación Audiovisual en Marruecos, explicó las iniciativas que se están impulsando en su país con el objeto de ampliar los espacios de igualdad. “El patriarcado es un sistema de dominación de los hombres y los medios de comunicación tienen una fuerza social tremenda. Por eso, pueden actuar de una forma positiva o negativa en temas de igualdad. Pueden reproducir el sistema patriarcal o deconstruirlo para contribuir a una sociedad más justa”.
Según los datos que aportó, la presencia de la mujer como fuente de la información que se publica en medios de todo el mundo no supera el 25% de media. España se sitúa en el 28% mientras que Marruecos se queda en el 20% del espacio total de los contenidos.
Pardo de Vera aseguró que la perspectiva de género está presente en la práctica diaria del periódico que dirige. “Hasta en las fuentes hay que forzar la igualdad de género”, admitió. Montserrat Domínguez reveló que las principales firmas de su medio son mujeres. Y puso el dedo en la llaga de la conciliación familiar. “En periodismo no existe”, afirmó tajante. “Las mujeres sentimos que el peso de la conciliación recae sobre nosotras”, agregó. A lo que Pardo de Vera añadió que la única forma de aligerar la injusta carga familiar sobre la mujer es la concesión de permisos de paternidad o maternidad igualitarios.
Angels Barceló ejerció como conductora de la mesa de la tarde, que contó con una activa participación del público.