[6]
A CIRCE.
SONETO.
Rinde tu ciencia, y con temor retira
de los
Guzmanes
rayos los febeos,
hija del sol, humilla tus trofeos,
su luz respeta, su grandeza admira.
Al plinto ilustre de tan alta pira [5]
consagra tu belleza y mis
deseos,
y, en vez de los laureles didimeos,
suspende al árbol de la paz la lira.
En luz que con el sol términos parte,
o quise hacerte fénix o perderte; [10]
pero ¿cómo podrás de mí quejarte,
pues tienes en las manos, que has de verte
la más heroica luz para ilustrarte
y el ingenio mayor para entenderte?