Carmen Blanco, que espera que la creación de la Cátedra acelere la constitución del futuro Centro de Estudios Gongorinos, ha realizado una semblanza sobre el profesor Roses, “uno de los mayores expertos en Góngora del mundo”, quien fue comisario hace dos años de la exposición ‘Góngora, la estrella inextinguible’ que conmemoró el 450 aniversario del nacimiento del poeta.
Joaquín Roses ha comenzado su conferencia con un alegato a favor de los “poetas muertos”, ya que “nunca deberíamos olvidarnos de quienes nos precedieron” en el tiempo. “Defiendo la vigencia de los poetas muertos”, ha apostillado para continuar diciendo que “los grandes escritores nunca rehúyen el magisterio de los clásicos”. No en vano, el profesor ha indicado que “los ojos de los poetas muertos brillan más que los de los vivos, como una estrella inextinguible”, sintagma que ya empleó para titular la exposición conmemorativa de 2011.
Para explicar la vigencia de Góngora, Roses ha manifestado que “el siglo de un poeta no es solo el de su trayectoria vital, sino el siglo en el que es leído”, en referencia al XX. Además, ha comentado que el poeta cordobés “llevó a la perfección un nuevo lenguaje poético”, siendo el “mejor conceptista” del denominado Siglo de Oro. Por otra parte, ha declarado que la influencia de Luis de Góngora fue grande en numerosos autores y grupos poéticos, haciendo especial hincapié en Luis Cernuda, por su “gongorismo disidente”. Y, a propósito de los homenajes institucionales que suelen hacerse de los autores clásicos, ha señalado que “por muchos centenarios que se celebren”, si el poeta no es leído, “su palabra queda en la nada”.