Antonio Colinas se ha aproximado a Luis de Góngora desde la experiencia personal, indicando que su presencia en el ciclo se justifica “como lector” y no como especialista en el autor cordobés. Colinas ha recordado que escribió su primer poema con 16 años en Córdoba, debido a su estancia en la ciudad para estudiar el bachillerato. El autor de ‘Sepulcro en Tarquinia’ ha explicado, relacionando su propia vida con la de Góngora, que el cordobés llegó a Salamanca –lugar de residencia de Antonio Colinas- también con 15 años, la misma edad con la que él vino a estudiar a Córdoba.
El escritor leonés ha señalado que siempre que le preguntan por qué autor siente especial predilección, piensa en Góngora, que aparece “desde el subconsciente”. Respecto a la obra del poeta cordobés, ha explicado que se lo puede comprender “sin el vigor de las imágenes”. “Pero no todo es lirismo, sino que otros de sus grandes dones son su contenido formal y su profundidad”, ha apostillado. Y ha manifestado que el poema “no es solo fotografía”, sino también “palabra nueva”, en referencia a la relevancia de la obra gongorina.
Las actividades de la Cátedra Góngora continúan el martes 3 de noviembre con una nueva sesión de Las tertulias del Dragón, en la que se abordará un fragmento de las ‘Soledades’.
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