Exiliado en Cuba, Domínguez desarrolló una excelente carrera profesional, realizando importantes obras como el edificio Radiocentro con Del Junco y Gastón (1945), o el Edificio FOCSA, con Gómez Sampera y Bartolomé Bestard (1953).
Hasta su fallecimiento, en Septiembre de 1970, se dedicó a la enseñanza, compartiendo sus conocimientos y percepciones culturales con sus alumnos de la Universidad de Cornell. Desde 1978 la Facultad de Architecture, Art and Plannig, dedica en su nombre el Premio Martín Domínguez a los más distinguidos docentes.