Seis de cada diez procedimientos que se abren en los Jugados de los
Penal de Córdoba por delitos de violencia de género terminan en
absolución. La razón, en un 64% de los casos, es la decisión final de la
víctima de no declarar debido a las presiones del entorno.
Las causas que provocan ese silencio y sus posibles
soluciones son el objeto fundamental de este estudio financiado por
Instituto Andaluz de la Mujer que junto con Osuna y Genovés firma también Borja Jiménez, fiscal delegado de
Violencia sobre la Mujer en la Fiscalía Provincial de Córdoba y profesor
asociado de Derecho Constitucional de la Universidad de Córdoba. Entre
las propuestas de este trabajo se encuentra la modificación del artículo 416 de la
Ley de Enjuiciamiento Criminal que dispensa a la víctima de su derecho a
declarar; una reforma legislativa que impida, en palabras de Mercedes
Osuna, que la víctima tenga que elegir "entre el riesgo y el
descrédito".
Con un lenguaje asequible se revisa el concepto de prueba, sus clases, la naturaleza y valor del testimonio de la víctima para, seguidamente, desmenuzar el derecho a no declarar y todo ello, analizarlo con la jurisprudencia mencionada y las entrevistas realizadas por mujeres que voluntariamente y de forma anónima han querido responder a varias cuestiones, y formular unas conclusiones generales y jurídicas que, según ha adelantado la responsable del IAM, se remitirán al Observatorio Andaluz de Violencia de Género y a los órganos que correspondan para que los juristas propongan una alternativa a este articulado y dar instrumentos a jueces y fiscales para que puedan condenar a los culpables con todas las garantías procesales.