Aristóteles y los Misterios
Alberto Bernabé Pajares
Universidad Complutense de Madrid
Santiago de Compostela, 31 de mayo del 2013.
A diferencia de Platón, Aristóteles no se interesó demasiado por Dioniso desde una perspectiva religiosa ni filosófica, ni le concedió papel alguno a la intervención de la βακχεία en la filosofía, ni le preocuparon gran cosa los efectos de la acción báquica sobre el ser humano. Con todo, se refiere en ocasiones a los misterios báquicos y a la religión y literatura órficas y nos ofrece algunos testimonios interesantes sobre ello. El más interesante es un fragmento en el que niega que en los misterios pueda aprenderse algo, pero les concede un valor como experiencia y como preparación psicológica para la vida y para la muerte.