Películas y documentales sobre la inclusión para ver un 21 de marzo

Ya sabéis que en TradAV, además de hablar sobre la traducción audiovisual, en fechas señaladas nos gusta descubrir películas sobre temáticas especiales. Películas de esas que nos relatan pequeñas grandes historias, y que nos invitan a reflexionar y debatir sobre temas trascendentes. Desde hace algunos años, una de esas fechas es el 21 de marzo y no por la llegada de la primavera, sino porque en diciembre de 2011, la Asamblea General de las Naciones Unidad lo designó como el Día Mundial del Síndrome de Down. Con esta celebración, la Asamblea General pretendía “generar una mayor conciencia pública y recordar la dignidad inherente, la valía y las valiosas contribuciones de las personas con discapacidad intelectual como promotores del bienestar y de la diversidad de sus comunidades”. Por eso, hoy os recomendamos una selección de películas y documentales sobre la inclusión y las capacidades diferentes.

The Peanut Butter Falcon (2019)

Hace unos días tuve ocasión de ver esta película y he de decir que me enamoró. Una road movie de los productores de Pequeña Miss Sunshine que nos invita a reflexionar sobre la forma paternalista en que algunos se empeñan en tratar a las personas con síndrome de Down. Precisamente, la película trata sobre la amistad de Zak, un treintañero que está harto de que lo traten como a un niño, y Tyler, un pescador tosco que resulta ser el único que no trata con lástima o condescendencia al protagonista. Es fantástico cómo Tyler repite constantemente a los demás: “Déjalo, él puede hacerlo solo”. Sin ánimo de hacer spoilers, creo que hay dos intervenciones de Tyler que, personalmente, me parecieron realmente profundas porque nos hacen replantearnos cómo abordar la discapacidad.

En la primera, Tyler critica a quienes sobreprotegen a Zak, ya que de manera a veces inconsciente le impiden experimentar, acertar, equivocarse, tener éxito o fracasar como cualquier persona.

Stop calling Zak a retard. People that call Zak a retard are only saying that he can’t do something they can. So you might not be saying the word retard but you’re sure as shit making him feel retarded. You make him think he is completely incap.

En la segunda, Tyler y Zak mantienen una conversación sobre sus metas en la vida y su capacidad para conseguirlas. Me encantó cómo Tyler, con toques de humor, le recuerda que todos tenemos limitaciones, sueños posibles… y otros imposibles. Pero nadie debe cuestionar esas capacidades más allá de uno mismo.

TYLER: You got a good guy heart. You can’t do shit about it, that’s just who you are… You’re a hero.

ZAK:  No, I can’t be a hero because I am a Down syndrome.

TYLER: What’s that got to do with your heart? Who told you that?

ZAK: Coach, teachers…

TYLER: What’d your coach say?

ZAK: He said I am retarded.

TYLER: Sounds like a shitty coach. Fuck your coach.

Si os apetece disfrutar de una película sobre la inclusión y la amistad, rodeada de humor y optimismo (algo bastante necesario en 2021), ya tenéis plan para este domingo.

Campeones (2018)

A día de hoy es raro que alguien no haya oído hablar (o no haya visto) esta comedia de Javier Fesser, ya que tuvo 11 nominaciones en los Premios Goya de 2019 de los cuales obtuvo tres (mejor película, mejor actor revelación y mejor canción original). Seguro que muchos recuerdan el maravilloso discurso de Jesús Vidal en el que nos emocionó con frases como “Ahora solo se me ocurren tres palabras: inclusión, diversidad y visibilidad. ¡Qué emoción siento!”.

Por si alguien aún no ha visto esta desternillante película, narra la historia de un entrenador profesional de baloncesto y un equipo compuesto por personas con discapacidad intelectual. Con un toque muy humano y una gran dosis de humor, la historia habla sobre prejuicios y estereotipos, pero también sobre la empatía, los pequeños logros, la superación y satisfacción personal.

La historia de Jan (2016)

Un Boyhood a la española que estuvo nominado a mejor documental en los Premios Forqué de 2017 y que inauguró el Festival de Cine de Málaga en el año 2016 como premiado en la sección documental. Dirigida por el cineasta Bernardo Moll (padre de Jan), esta obra llena de sensibilidad recoge imágenes de Jan desde su nacimiento y durante seis años, en tiempo real, para narrar el proceso de aceptación de sus padres, describir sus miedos, y cómo no, celebrar cada pequeño progreso del protagonista de esta historia †Según Filmaffinity, “a través del sentido del humor, el esfuerzo y el amor por Jan, sus padres buscan normalizar y dar visibilidad al desconocido mundo de la discapacidad”.

Toda una lección de vida de la que seguro que podemos aprender mucho, empezando por una de las frases de la madre de Jan que podemos aplicar ante cualquier adversidad:  “Me lo puedo perder llorando y no me lo quiero perder llorando”.

The Punk Syndrome (2012)

Para quienes también seáis amantes de la música, de Eurovisión y de las producciones en lenguas “exóticas”, incluimos en la lista este documental finlandés dirigido por Jukka Kärkkäinen y Jani-Petteri Passi. The Punk Syndrome narra la historia de Pertti Kurikan Nimipäivät (PKN), una banda formada por músicos con autismo y síndrome de Down que representó a Finlandia en Eurovisión en 2015  y que llegó en semifinales.

El documental muestra cómo PKN hace uso del punk (que siempre ha sido uno de los altavoces para inconformistas) para protestar contra la frustración y las dificultades para acomodarse en una sociedad que no siempre es inclusiva. A pesar de la dureza de algunas imágenes, no deja de ser un homenaje a la ‘anormalidad’ y una reflexión sobre el respeto y la justicia.

Yo, también (2009)

La opera prima de Álvaro Pastor y Antonio Naharro nos cuenta una historia de amor sobre almas gemelas y la ruptura de barreras convencionales. Pablo Pineda, el primer europeo con síndrome de Down en obtener un título universitario, construye en su alter ego, Daniel Sanz, un sevillano tenaz, franco y lleno de humor e ironía, que se ríe de sí mismo y cuestiona qué es ser diferente. La película obtuvo las Conchas de Plata a mejor actriz (Lola Dueñas) y al mejor actor (Pablo Pineda) en la edición 57 del Festival de Cine de San Sebastián. Se trata de una película sencilla y realista que cuestiona qué es normal y qué no, sin caer en sensiblerías.

Como dato curioso para cerrar este post, ¿sabéis que hoy muchas personas se ponen los calcetines desparejados para demostrar la importancia de la inclusión y de la diversidad?