foto grupo de investigación HUM 298GRUPO LABORATORIO DE ESTUDIOS SOBRE CONVIVENCIA Y PREVENCIÓN DE LA VIOLENCIA

Responsable del grupo: Rosario Ortega Ruiz

La transferencia ha sido siempre un objetivo concreto de todos los proyectos de investigación realizados por este grupo y que están relacionados con el sistema educativo, la salud y el bienestar social. Sus trabajos de investigaciones sobre el fenómeno del acoso escolar, las relaciones interpersonales y la calidad de la vida gozan de resultados relevantes a nivel europeo e internacional.

¿En qué sector desarrolla su equipo la transferencia?

Somos un laboratorio de estudios psicológicos, sociales y educativos, así que nuestro ámbito de transferencia es el sistema educativo formal e informal, la salud y el bienestar social, así como la sociedad y la cultura. De hecho, la revista científica que creamos hace ya más de quince años, Psychology, Society and Education, es una buena expresión de nuestra perspectiva científica, que tiene a la psicología del desarrollo y a la educación como disciplinas pero cuyo plan de actuación se realiza desde una triple y articulada perspectiva: la psicología del desarrollo y la educación, los aspectos biológico-sociales que aportan las culturas y las prácticas sociales que van cambiando y que actúan dialécticamente con los basamentos neurocientíficos (cognición, emoción, aprendizaje y conducta).

¿Desde cuándo hacen transferencia?

Desde siempre, son las instituciones académico-científicas las que hasta hace poco no valoraban las actividades de transferencia de conocimiento que nosotros hemos incluido en nuestros proyectos desde que somos un laboratorio de trabajo científico, allá por el año 1991, cuando se crean en nuestra comunidad los primeros equipos de investigación y se empieza a recibir alguna financiación de infraestructura para el trabajo. De hecho el grupo que dirijo existe desde la primera convocatoria para el mapeo de equipos.

¿Qué resultados de investigación han sido claves para que puedan tener una labor tan activa en transferencia?

Nuestras investigaciones sobre el fenómeno del acoso escolar -bullying y cyberbullying- el dating violence, el juego infantil, el conocimiento social y en general sobre relaciones interpersonales y calidad de la vida, el desarrollo y el aprendizaje han tenido procesos y resultados relevantes a nivel europeo e internacional. Nuestro equipo estuvo integrado, desde los primeros años de la década de los 90 en equipos internacionales y la producción científica se diseminó coherentemente en estos ámbitos. Pero en nuestros procesos de investigación, cuyas muestras y análisis, han contado siempre con las escuelas (docentes, familias y escolares) hemos asumido que el sistema educativo no está sólo para recoger datos, analizarlos y vertir resultados a nivel científico, sino que teníamos y seguimos teniendo un compromiso con las escuelas, las familias y la sociedad en general. Siempre hemos enviado informes de resultados a las escuelas y éstas a las familias, siempre hemos atendido a periodistas e instituciones sociales en sus demandas y siempre hemos incluido un objetivo de investigación sobre programas de prevención o paliativos de los efectos negativos de los fenómenos estudiados, que, han estado alrededor, no sólo del acoso escolar, sino de las relaciones interpersonales, de la convivencia, del clima y los riesgos que los fenómenos de violencia ejercen sobre la población escolar, etc. Es decir, la transferencia ha sido siempre un objetivo concreto de todos los proyectos de investigación realizados.

¿Con qué empresa/s suelen trabajar más? ¿Son todas ellas del mismo sector?

Normalmente trabajamos con instituciones públicas, escuelas, centros sociales, asociaciones familiares, etc. En nuestras investigaciones siempre hemos incluido escuelas privadas o corporaciones, entre otras, pero no hemos recibido financiación concreta de este tipo de instituciones. Nuestra financiación siempre proviene de las convocatorias de las grandes agencias de investigación: el Plan Nacional I+D+i; los distintos planes regionales -la financiación para infraestructura de la Junta de Andalucía desde los años noventa hasta hoy ha sido una aportación sólida y muy útil- y, muy especialmente, los distintos programas de la Unión Europea, que han sido la fuente de recursos más importante que hemos tenido y seguimos teniendo.

- Leer más...

Pero también hemos tenido contratos-proyectos directamente con gobiernos e instituciones internacionales, como la propia Unión Europea en sus diversos programas de estímulo y promoción de la calidad educativa y de la mejora de las instituciones educativas, o el Banco Interamericano de Desarrollo, o gobiernos regionales/autonómicos españoles, o por ejemplo, el gobierno-liberal de Nicaragua.

¿Cómo compaginan el trabajo de investigación con las tareas de transferencia? ¿Tienen tiempo para llevar las dos tareas en paralelo?

La transferencia está incluida siempre en los proyectos, porque la naturaleza de nuestra investigación lo exige. Si investigas sobre violencia interpersonal o, en general, sobre problemas psicosociales, lo menos que tienes que hacer es que el conocimiento que se genera permita prevenir problemas que has puesto en evidencia, reparar causas y orígenes de comportamientos o fenómenos de los cuales vas teniendo más y más conocimiento, más y más precisión y detalle, así pues los grandes proyectos han incluido un objetivo específico de transferencia hacia los centros educativos o las instituciones para las que hemos trabajado.

- Leer más...

Recuerdo un proyecto-contrato con la Junta de Andalucía, que duró cinco años y que tuvo más inversión de recursos humanos, de financiación y de esfuerzo investigador, en transferencia que en el propio proceso científico, que ya había recibido financiación de la Agencia Estatal de Investigación -la ANEP- del momento, entre los años 1996-2000. U otro del Interamerican Bank of Development, que recibió una importante financiación en aquel momento, para realizar un diagnóstico sobre el estado de la violencia escolar en cuatro países de Centroamérica.

¿Cuántas personas forman parte de su grupo de investigación?

Es un equipo grande, en el que están al menos 25 doctores con trabajo activo en investigación, ya de carácter post-doctoral y siempre un importante número de doctorandos que se forman en proyectos y actividades muy vinculados al trabajo del laboratorio. En la actualidad, y siendo ya profesora emérita, el equipo grande se organizó en cinco grandes subgrupos de investigación y al frente de cada uno de ellos había una investigadora o investigador principal que aplica y recibe financiación para proyectos, normalmente, europeos o del Plan Nacional, o ayudas regionales gubernamentales, pero también se están recibiendo fondos de programas de corporaciones, como el BBVA, Mapfre, la Caixa. Desde siempre, también concursamos a los programas de financiación para la formación de doctores y para posiciones post-doctorales.

-¿Han dirigido Tesis industriales en su grupo?

Pues tuvimos un primer intento fallido porque la verdad es que la normativa de nuestra Universidad no estaba todavía lista y ahora, ya con la nueva normativa en marcha, se va a defender una primera Tesis Industrial de una doctoranda de Cataluña que está dirigida por uno de los miembros del laboratorio junto conmigo. Estamos muy contentos con haber logrado vencer bastantes impedimentos burocráticos y esperamos que la tesis se defienda en plazo desde que la doctoranda recibió la ayuda financiera correspondiente.

- ¿Tienen alguna patente o están en proceso de petición o concesión?

No, somos autores de un amplísimo número de derechos de autor para instrumentos de medida, programas específicos de intervención preventiva o paliativa, etc. pero patentes no tenemos. En realidad, quizás la patente es más un producto industrial que social o cultural.

-¿Han pensado crear Empresas de Base Tecnológica gracias a los proyectos de transferencia?

No, no lo hemos pensado, aunque en el laboratorio se realizan actividades de transferencia con grandes corporaciones como el proyecto que dirigió el profesor Calmaestra para la Corporación del Club-Futbol del Barcelona, y otros. A pesar de que hemos hecho trabajos en cooperación con grupos que se han ocupado de ciber-actividades y podrían haber dado lugar a ello, finalmente no lo hemos desarrollado.

-¿En qué piensa que la UCO puede ayudar a los grupos que hacen transferencia para seguir potenciando y si es posible incrementando esta tarea?

La verdad es que tengo una buena opinión de cómo me ha ayudado la UCO en mis iniciativas investigadoras, a pesar de que hubo momentos complicados. Recuerdo la enorme dificultad que tuve cuando llegué a la UCO en el año 2001 y traje el proyecto-contrato con el Interamerican Bank of Development y encontramos todas las dificultades del mundo por la gestión económica del mismo. Pero luego, yo he dirigido muchos contratos-proyectos y siempre la OTRI ha facilitado, ayudado y allanado los problemas. Creo que ahora, en los últimos años, tanto los académicos que dirigen la OTRI como los técnicos tienen una clara conciencia de que están para ayudar a la investigación y la transferencia y eso es muy bueno.

 

Conoce más detalles de este grupo su web: www.laecovi.com