Asimismo, han participado en el evento Javier Aznar, director de Área de Negocios de Caixabank en Córdoba; Yolanda López, delegada de Andalucía de Fundación “la Caixa”; Mili Jiménez Melero, delegada de la Fundación CAJASOL; Jesús Poyato Varo, director adjunto del centro Sagrado Corazón, adscrito a la UCO; Mª Paz Aguilar Caballos, decana de la Facultad de Ciencias; Blas Segovia, Aguilar coordinador del Grado de Educación Social; Fernando Chacón, secretario del Consejo Social de la UCO; Mª del Mar Delgado Serrano, delegada del rector para Proyección Internacional; Eva Timoteo Castiel, delegada de Servicios Sociales e Igualdad del Ayuntamiento de Córdoba; y Luis Maya Pardal, presidente de la Asociación Vecinal Unión y Esperanza de las Palmeras.
Rosario Mérida ha reseñado que este proyecto nace fruto del Plan de Desarrollo Integral elaborado por los propios vecinos de Las Palmeras, que se aproximaron a varias entidades educativas, entre ellas la UCO, institución que recogió el guante ya que “la Universidad es una institución comprometida con el desarrollo personal y profesional de las personas que cohabitan su territorio y, en este sentido, es consciente de que la educación es una herramienta clave para lograrlo”. La vicerrectora ha explicado que este año se han ampliado las ayudas a seis estudiantes más, por lo que ya son doce los alumnos de Las Palmeras que recibirán la beca. Por su parte, el rector de la UCO ha agradecido su implicación a todas las entidades financiadoras “por permitir que la Universidad cumpla con su objetivo social más fundamental, que es el de generar oportunidades para todas las personas”. A los estudiantes becados de Las Palmeras los ha animado a no rendirse nunca y ha resaltado el papel de las familias de los estudiantes como agentes de transmisión de valores para sus hijos. Igualmente, ha tenido palabras de agradecimiento para los universitarios voluntarios participantes en el programa, de quienes ha dicho que son un ejemplo de juventud comprometida que está en la Universidad para algo más que aprobar asignaturas.
El programa es fruto del convenio suscrito en abril de 2018 entre la Universidad de Córdoba y la Asociación Vecinal Unión y Esperanza de Las Palmeras con el fin aumentar la implicación en las enseñanzas universitarias del alumnado en esta barriada cordobesa, así como evitar el absentismo escolar, reducir el nivel de fracaso y abandono escolar, facilitar el acceso a la Universidad, promover el éxito académico y la obtención de titulaciones de Grado en la Universidad de Córdoba. En octubre de 2019 se incorporó a esta iniciativa la Obra Social La Caixa y este 2021 también ha contado con financiación de la Fundación Cajasol para la adquisición de equipos informáticos para los estudiantes becados. Yolanda López, delegada de Andalucía de Fundación “la Caixa”, ha destacado durante su intervención que “la Fundación “la Caixa” desde hace más de 115 años de historia, tiene un compromiso social intenso. En ese siglo largo, Fundación “la Caixa” ha trabajado para contribuir al bienestar de las personas, sobre todo a aquellas que más lo necesitan, por eso, gracias al convenio de colaboración con la Universidad de Córdoba, se nos permite complementar nuestras líneas prioritarias que tienen como objeto favorecer la transformación socioeducativa de estos estudiantes”. Por su parte, Mili Jiménez Melero, delegada de la Fundación CAJASOL, ha agradecido a la UCO la iniciativa y ha dado la enhorabuena a los estudiantes, tantos voluntarios como becados, por ser un ejemplo de compromiso.
Necesidades básicas y apoyo emocional
Para la consecución de los objetivos del programa, se han creado grupos educativas entre los seis estudiantes universitarios voluntarios –tres alumnas del Grado de Educación Social, dos alumnos del Grado de Química y una alumna de Bioquímica- y los estudiantes becados de Las Palmeras, de modo que cada universitario ofrecerá acompañamiento y motivación a dos alumnos becados de Las Palmeras para que continúen con sus estudios. Simultáneamente, se les ha asignado una ayuda a las familias para cubrir las necesidades básicas del alumnado. Este apoyo se ve reforzado con los materiales que se han entregado consistentes en un ordenador, equipamiento y acceso a las instalaciones deportivas de la UCO, tarjeta joven de Aucorsa, el desarrollo de competencias lingüísticas con un curso de 60 horas de inglés y el refuerzo para el estudio del Servicio de Atención Psicológica.
Luis Maya Pardal, presidente de la Asociación Vecinal Unión y Esperanza de las Palmeras, ha felicitado a los estudiantes becados y ha hecho hincapié en el papel de las familias por “sembrar futuro, lo cual hace que hoy se un día de alegría y arcoíris a pesar de la lluvia”. Jesús Campos Reyes, representante de los alumnos becarios del curso 20/21, ha relatado a los asistentes su historia de superación, que le llevó de ser expulsado de varios colegios de adolescente a estar cursando hoy su primer curso en la Universidad. Con la ayuda económica de varias entidades, Jesús se matriculó en un ciclo de Integración Social, “a pesar de que entré casi sin saber multiplicar”, y hoy es el primer miembro de su familia que ha logrado llegar a la Universidad.
En nombre de las familias de los alumnos becados ha intervenido José Manuel Molina Marín; y representando a los voluntarios de otros años, Carmen Sánchez Ruiz. José Antonio Fresco Moyano, alumno de 4º de Químico, ha hablado en nombre de los otros cinco universitarios voluntarios para este curso 20/21. En su intervención, ha animado a los alumnos de Las Palmeras a continuar esforzándose a pesar de obstáculos que puedan encontrar en el camino y les ha exhortado a no dejar nunca de aprender, pues “es algo que siempre permanece, a pesar de las pandemias y de cualquier otra crisis que nos encontremos”. José Antonio ha subrayado que “tenemos la suerte de estar en una sociedad que cuenta con herramientas y redes de solidaridad, lo cual no ocurre en otros países del mundo”, y ha explicado que se animó a ser voluntario porque “siempre he contado con todo el apoyo familiar y de mi entorno para seguir en mis estudios y me pregunto qué hubiera sido de mí si me hubiera encontrado las mismas piedras en el camino que han encontrado estos chicos de Las Palmeras”.