Este sello, por un lado, facilita a las organizaciones demostrar su participación en el registro y, por otro lado, permite reflejar el grado de esfuerzo acometido por las mismas en la lucha contra el cambio climático.
En este sentido, se distinguen los años en los que la Universidad ha calculado su huella de carbono y se encuentra en la senda de reducir sus emisiones (sello “CALCULO” para los años 2014,2015, 2016 y 2020) y los años en los que, además, ha conseguido reducir el ratio de emisiones respecto al promedio de ratios del periodo anterior (sello “CALCULO Y REDUZCO” para los años 2017, 2018 y 2019).
El registro de la huella de la UCO hace referencia a las actividades de docencia, investigación, gestión administrativa y de mantenimiento de los servicios e instalaciones desarrolladas en los cuatro campus que componen nuestra entidad: Rabanales, Menéndez Pidal, Centro y Belmez. Asimismo, los cálculos se han aplicado a las fuentes de emisión correspondientes a los alcances 1 y 2, es decir, emisiones directas a la atmósfera y emisiones indirectas ligadas al consumo eléctrico. La herramienta de cálculo utilizada ha sido la facilitada por el MITECO y los factores de emisión empleados los incluidos en dicha herramienta.
En la actualidad el Registro contempla algo más de 5.000 huellas inscritas pertenecientes a 2.129 organizaciones. De estas huellas, 65 corresponden a registros de 12 Universidades españolas que, igual que la Universidad de Córdoba han decidido formalizar este compromiso.