El proyecto tiene como objetivo la realización del seguimiento de la evolución de la presencia de material genético del virus SARS-CoV-2 (causante de COVID-19) en las aguas residuales de la red de saneamiento de la ciudad de Córdoba con el fin de anticipar la aparición de posibles nuevos brotes en la población. En concreto, se determinará la presencia de este virus en la entrada a la Estación depuradora de Aguas Residuales (EDAR), colector de la margen izquierda del Guadalquivir y dos de las bifurcaciones de la margen derecha del río (por corresponder con una mayor densidad demográfica).
Una vez obtenidos los resultados se evaluará la posible influencia de distintas variables tales como el área geográfica a la que dan servicio los colectores de la red de saneamiento origen de las muestras y la influencia en la detección y cuantificación de factores como proximidad de instalaciones sanitarias o la pluviometría, entre otros.
El trabajo será llevado a cabo por personal de los departamentos de Genética, Bioquímica y Biología Molecular y Química Inorgánica e Ingeniería Química de la Universidad de Córdoba y correrá a cargo del grupo UCOVID19, único grupo de investigación de la Universidad de Córdoba autorizado y capacitado por el Instituto de Salud Carlos III y la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía para el diagnóstico del SARS-CoV-2 en muestras biológicas potencialmente infectadas. El seguimiento se realizará en colaboración con investigadores del grupo RNM-271 con más de 30 años de experiencia en el campo de las aguas residuales dada las características de la muestra. Por parte de la UCO, los responsables del proyecto serán los profesores José Garrido Pavón, Carmen Michán Doña y Mª Ángeles Martín Santos, que tendrán como interlocutor válido por parte de EMACSA, a Joaquín Aguilar Jiménez.
El proyecto tendrá una duración de seis meses y un coste de 65.000 euros.
El rector de la Universidad de Córdoba, José Carlos Gómez Villamandos, ha destacado la importancia de este acuerdo que pone de manifiesto “la estrecha colaboración institucional que, a lo largo de la pandemia, se ha materializado en múltiples acciones”. En relación con el acuerdo suscrito hoy, Gómez Villamandos ha señalado el interés de la UCO “en participar y colaborar con el Ayuntamiento en el desarrollo de este proyecto". El rector ha agradecido el compromiso del personal investigador de la UCO, “multidisciplinar y con mucha experiencia” en el estudio de aguas residuales y también en el ámbito de la genética, biología molecular y la COVID-19 que permitirá comprobar de manera cuantitativa "qué cantidad hay y el grado de presencia que tiene el coronavirus y el riesgo que eso conlleva para prevenir posibles brotes".
El alcalde de Córdoba, José María Bellido, por su parte, ha destacado también la importancia de este acuerdo entre las diferentes instituciones y ha recordado que "la prioridad de mi gobierno es garantizar la seguridad y salud de todos los cordobeses". Bellido ha señalado que con este acuerdo “se une responsabilidad social, eficacia en la gestión la calidad científica de la Universidad de Córdoba".
Por último, el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre Muñoz, ha resaltado que este proyecto “aporta información de gran utilidad de cara a anticiparnos sobre la circulación del virus, la detección precoz de casos y la puesta en funcionamiento de medidas de contención si fuesen necesarias”. Aguirre ha explicado que, aunque en Sevilla ya está en marcha un acuerdo similar, el de Córdoba es el único de Andalucía que incorpora a la Universidad para realizar la investigación de las aguas residuales.
El rector y el vicerrector de Investigación y Desarrollo Territorial con con los responsables de los equipos de la UCO encargados de la realización de estudio.